POR VENTURA DE JESÚS

Escribir La escuela fue reconstruida por un monto cercano a los tres millones de pesos en moneda total, e inicia con una matrícula de 113 alumnos. Foto: Ventura de Jesús García una leyenda
MATANZAS.— La escuela de oficios de la Oficina del Conservador, inaugurada aquí este lunes y sexta de su tipo en el país, deviene impulso al proyecto iniciado por el aniversario 325 de la urbe y sostiene la conveniencia estratégica de preservar a la ciudad contra los embates del tiempo.
Aquí se formarán los futuros restauradores y conservadores de los bienes patrimoniales de una villa considerada por arquitectos y especialistas en urbanismo la más moderna que erigieron los españoles en el Nuevo Mundo, manifestó Leonel Pérez Orozco, conservador de la ciudad, en la apertura oficial del centro de estudios.
José Dionisio Descán Galván, el director, dijo que la escuela fue reconstruida por un monto cercano a los tres millones de pesos en moneda total e inicia con una matrícula de 113 alumnos en condición de obreros calificados.

El centro lleva el nombre del arquitecto italiano Daniel Dall’ Aglio, quien concibió obras de inestimable valor mundial como el Teatro Sauto, y la iglesia de San Pedro Apóstol, en el reparto de Versalles, la mejor de su tipo construida en el siglo XIX. Foto: Ventura de Jesús García
Precisó que la misma dispone de ocho aulas y cuatro talleres-laboratorios, donde cobran vida antiguos oficios de restauración, entre los que destacan la arqueología histórica, ebanistas, albañilería, ceramistas, herrería, jardinería y la yesería.
La escuela lleva el nombre del arquitecto italiano Daniel Dall’ Aglio, quien concibió obras de inestimable valor mundial como el Teatro Sauto, y la iglesia de San Pedro Apóstol, en el reparto de Versalles, la mejor de su tipo construida en el siglo XIX.
Pérez Orozco insistió que en pocos meses desandarán por las calles de Matanzas decenas de aprendices con conocimientos especializados, vital para mantener en buen estado las obras que hoy se reaniman y otras que están por iniciar.
Adrián Álvarez Chávez, especialista de la Oficina, comentó que la Escuela de Oficios es de las mejores cosas que le ha ocurrido a la ciudad «porque se rescatan una serie de oficios imprescindibles para la restauración y el mantenimiento del patrimonio».
Abel Santamaría Bacallao, el administrador, elogió el estado constructivo del inmueble y agradeció en particular la donación de una moderna carpintería con tecnología de punta, la cual facilitará la formación de los alumnos.
Para el estudiante Israel Tápanes Torres, estudiante de albañilería integral, será una bonita experiencia. «Estoy súper contento, es un sueño realizado; quiero prepararme para lo que haga falta y servir a la sociedad».