
Abanderan delegación de azucareros.
Para los calimetenses es un honor contar con un sitio que tiene plasmadas las huellas de José Martí. A casi 10 kilómetros del poblado cabecera se ubica Caimito del Hanábana, lugar donde vivió el Maestro a la edad de nueve años.
El niño llegó a este sitio acompañado de su padre, Don Mariano, quien había sido designado Capitán Pedáneo para eliminar el tráfico ilegal de esclavos por esta zona. La misión de Pepe era ayudarle con los apuntes de los registros oficiales, por su excelente caligrafía.
En este lugar, dotado de encantos naturales, favorecido por la cercanía del río Hanábana, permaneció Martí alrededor de ocho meses. Sobre las vivencias en el campo contó a su madre Leonor en una carta fechada el 23 de octubre de 1862.
Cada año, este día representa un motivo de acercamiento de los calimetenses al monumento erigido aquí para condecorar a estudiantes, trabajadores, combatientes, federadas y cederistas, entre otros merecedores, y de esta manera rendirle tributo a nuestro Héroe Nacional.

Memorial Caimito del Hanábana.

Tarja conmemorativa.